Una semana fantástica aprendiendo a navegar con William. Él tiene dos barcos y yo estaba en el barco con una tripulación más experimentada. Tenía mi propio camarote, muy cómodo. Solo éramos tres tripulantes, así que todos pudimos ser patrones durante dos días cada uno. Fue divertido, emocionante y, por supuesto, con paisajes impresionantes. William es paciente y tiene muchísimos conocimientos para compartir. Un abrazo.
Leer más