Desde los 6 años, cada domingo de verano navegaba en un pequeño bote de 6m de eslora, para salir a pescar y navegar con mis padres y un gran amigo de la familia, patrón veterano, marinero experimentado que conocía cada ricón de nuestras rías y los mejores caladeros y pueblos marineros de la zona. Muchas aventuras vividas, la pesca, y sobre todo esa sensación de surcar los mares, es uno de los mejores recuerdos de mi infancia. Desde entonces, enganchado para siempre a este increíble medio, a sus sensaciones, sus riquezas, sus peligros... Con mucho esfuerzo, trabajo y sacrificio, he logrado cumplir mi sueño desde esos años tan tempranos, llegar a tener mi propio barco.

Muchas millas navegadas, todas las titulaciones de recreo, acabé convirtiéndome en patrón profesional, realizando traslados, travesías de todo tipo, etc. para tratar de disfrutar al máximo de mi gran pasión e intentar al mismo tiempo transmitírsela a los demás.