La libertad que tenemos aquí se debe al hecho de que la distancia entre las dos islas de Antigua y Guadalupe es bastante corta.
Comenzando en Guadalupe y saliendo del bonito puerto deportivo de Bas du Fort, tenemos las siguientes opciones hasta finalizar el viaje en Antigua:
1. Conducimos directamente hacia el norte pasando Guadalupe. Visitamos el Parque Nacional Jacques Costeua y luego podemos elegir entre varios desvíos hacia el oeste o el noroeste. Podemos hacerlo en St. Kitts y Nevis o en Montserrat. Visita – o ambas islas. Están un poco fuera de lo común y ofrecen un encanto relativamente rudo y poco turismo.
2. Primero visitamos las islas del sur de Isles des Saintes, Marie Galante e Isle des Petites Terres, que pertenecen a Guadalupe y tienen muchas atracciones guardadas sin tener que “superar” millas. Luego nos dirigimos hacia Antigua.
3. ¡O conducimos primero hacia el sur, a Dominica! Además de fantásticas cascadas y una prístina selva interior, esta belleza ofrece probablemente la gente más amigable de las Antillas Menores. Pero no encontraremos ningún puerto deportivo ni nada digno de llamarse “supermercado”. No importa, de todos modos sólo queremos anclar. Nada más entrar en nuestro fondeadero, los lugareños vienen y nos ofrecen pescado fresco (lo llevaremos si no pescamos), fruta y excursiones al interior. Luego diríjase hacia el norte pasando Guadalupe hasta Antigua.
4. También podemos centrarnos en las hermosas playas de Antigua y Barbuda. Fondeamos en la playa de arena más larga y solitaria de las Antillas Menores. En la propia Antigua visitamos las rayas que son atraídas por un banco de arena en el este. Una experiencia de estar sumergido en el agua hasta la cintura y sosteniendo una raya en tus brazos.
No importa qué opción elijamos, serán 14 días intensivos y variados, lamentablemente en algún momento llegará a su fin y estarás lleno de impresiones y te preguntarás dónde han ido las dos semanas.
Ambos, Rosy y Armin, vivimos en el Caribe en nuestro HECTOR desde 2019.
HECTOR es un catamarán de 44 pies de DEAN de Sudáfrica (construido en 2002) en muy buen estado y equipado con todo lo importante para garantizar la seguridad y el confort.
Por dentro parece un barco con mucha madera y no una exposición de IKEA. Aunque HECTOR ofrece espacio para 8-10 personas con sus 4 cabinas dobles y espacio para dormir en el salón, solo aceptamos un máximo de 4 huéspedes en nuestros viajes a las Antillas Menores. Eso significa que tenemos un máximo de 6 personas a bordo. Nuestro lema es tanta libertad e individualidad para todos como sea posible.
Otro punto central de nuestra oferta es la excelente comida que Rosy, nativa de Cuba, le ofrece. Ella conoce todos los alimentos que crecen en el Caribe por experiencia propia. Intentamos comprar localmente tanto como sea posible en mercados, pescaderías y otros proveedores locales. ¿Qué evocará entonces Rosy para todos nosotros? ¡Déjate sorprender!
Un restaurante flotante ya se llama HECTOR.
Quizás nos veamos pronto a bordo o nos comunicaremos en otro lugar.
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